Fuente: Enablon Insights. Traducido por Laragon.
Para las organizaciones que participan en un proceso de selección de software EHS, no cabe duda de que un sistema de software ayudará a mejorar la gestión en materia de medio ambiente, salud y seguridad, pero también deben tener en cuenta el personal, los procesos, la cultura organizativa y otros aspectos que influyen en el rendimiento.
Las organizaciones deben establecer sus objetivos en materia de medio ambiente, salud y seguridad antes de implementar un sistema de software de EHS. Una pregunta importante que necesitan hacerse es la siguiente:
«¿Debería haber un enfoque centralizado o descentralizado de la gestión en materia de medio ambiente, salud y seguridad?».
Cada industria es diferente y cada organización es única, por lo que la respuesta a la pregunta variará. Pero he aquí una respuesta que probablemente se aplicará a la mayoría de las organizaciones globales: Se necesita un equilibrio entre la centralización y la descentralización. Ir plenamente en una u otra dirección no es lo ideal porque habrá situaciones que requerirán cierta descentralización.
Para ilustrar la necesidad de un equilibrio entre la centralización y la descentralización, veamos cuatro ejemplos para cada enfoque.
Ejemplos en los que la centralización ayuda
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Seguimiento de métricas:
Cada sitio, instalación o unidad de negocio hará un seguimiento de sus propias métricas e indicadores, pero es necesario implantarlos para que los indicadores clave de desempeño puedan ser rastreados y reportados a nivel corporativo, y comunicados a las partes interesadas pertinentes. La centralización de la gestión EHS facilita la medición del rendimiento en materia de medio ambiente, salud y seguridad para toda la empresa.
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Sitios de evaluación comparativa:
La centralización de la gestión EHS también facilita la evaluación comparativa de emplazamientos individuales para diferentes métricas, y permite ver de cuáles el resto de la organización debería aprender y cuáles necesitan mejorar.
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Compartir las buenas prácticas:
Cuando todo el mundo está en la misma plataforma y todos ven exactamente lo mismo, es más fácil compartir información, incluidas las mejores prácticas de los sitios de mejor rendimiento, que pueden ser adoptadas por todos los demás sitios. Esto permite que todos los sitios apunten a los mismos estándares de rendimiento.
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Promover una cultura de seguridad uniforme:
Usted desea asegurarse de que todos los trabajadores de la organización se adhieran a los mismos valores y actitudes de su cultura de seguridad global, a pesar de las diferencias culturales y lingüísticas entre los distintos lugares. La centralización de la gestión en materia de EHS facilita la promoción de la misma cultura de seguridad en todos los emplazamientos.
Ejemplos en los que la descentralización ayuda
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Diferentes unidades de negocio:
Esto es especialmente aplicable a los conglomerados globales. Por ejemplo, una unidad de negocio que está en la industria del petróleo y el gas y otra que fabrica artículos para el hogar tendrá dos tipos de necesidades muy diferentes. Algunos elementos pueden estar centralizados (por ejemplo, un sistema de gestión común, un sistema de información común, etc.), pero ambas unidades de negocio también necesitarán hacer algunas cosas de forma autónoma porque son muy diferentes.
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Diferencias culturales:
En cualquier organización global, siempre habrá una necesidad de tener cosas en común, como una cultura de seguridad global uniforme. Pero las diferencias culturales y lingüísticas pueden ser significativas, por lo que también es necesario dar cierto grado de autonomía a los lugares individuales para hacer las cosas a su manera, aunque los objetivos corporativos deben ser los mismos.
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Fusiones y adquisiciones:
En este ejemplo, la descentralización temporal puede ser buena. Finalmente, todas las unidades de una organización deben estar en el mismo programa EHS y adherirse a la misma cultura EHS. Pero si una unidad recién adquirida tiene un programa de EHS maduro y un fuerte desempeño en materia de EHS, es mejor dejar que continúen haciendo las cosas a su manera por un tiempo, y que gradualmente hagan la transición de su programa de EHS al programa corporativo, en lugar de hacerlo abruptamente y correr el riesgo de perjudicar el desempeño en materia de EHS. Como dicen: «Si no está roto, no lo arregles». Al menos no de inmediato.
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Cumplimiento normativo:
Este es un asunto delicado. La idea no es que el cumplimiento deba descentralizarse, sino que puede ser necesario algún nivel de descentralización para permitir que los directores locales de medio ambiente, salud y seguridad o los administradores de sitios que conocen mejor las normativas locales, e incluso que pueden estar en contacto con las autoridades locales, cumplan eficazmente con las normativas a su manera, siempre y cuando informen sobre el estado de cumplimiento al resto de la organización y se adhieran a la cultura global de medio ambiente, salud y seguridad. La idea es adoptar una visión global, aprovechando al mismo tiempo los conocimientos y la experiencia locales.
La mejor manera de lograr un equilibrio entre la centralización y la descentralización de la gestión en materia de medio ambiente, salud y seguridad es reconocer los casos en los que tiene sentido algún nivel de descentralización, y darse cuenta de que existen diferentes niveles de descentralización, es decir, que no se trata de una propuesta de «todo o nada».