Según el Informe anual de accidentes de trabajo en España, durante el año 2022, se ha registrado un total de 653,510 accidentes de trabajo con baja, revelando una realidad preocupante sobre la seguridad laboral en España. De estos, el 87.4% ocurrieron durante la jornada laboral, mientras que el resto tuvieron lugar durante el trayecto del domicilio al centro de trabajo o viceversa, conocidos como accidentes in itínere.
Fuente: Elaboración del INSST a partir del Fichero de microdatos de accidentes de trabajo 2022. Ministerio de Trabajo y Economía Social (MITES).
Por tipo de trabajador
Los datos más impactantes surgen al analizar la distribución de estos accidentes por tipo de trabajador. Del total de accidentes en jornada laboral, el 94.0% afectó a la población trabajadora asalariada, mientras que el 6.0% restante ocurrió entre la población por cuenta propia. Esto pone de relieve la vulnerabilidad de los trabajadores asalariados frente a los accidentes laborales.
En términos de afiliados a la Seguridad Social con contingencia por accidente de trabajo, se contabilizaron 19.4 millones de afiliados, de los cuales 16.1 millones eran asalariados y aproximadamente 3.3 millones por cuenta propia. Estas cifras subrayan la magnitud del problema y la importancia de abordarlo de manera urgente.
En este documento, elaborado por el Instituto Nacional de Seguridad y Salud, se expone que el índice de incidencia, utilizado para evaluar el efecto de los accidentes de trabajo, fue de 2,950.7 por cada 100,000 trabajadores afiliados en 2022. Este índice varía según sexo, gravedad y edad, revelando disparidades significativas en la distribución de los accidentes laborales.
En cuanto al sector, la construcción encabezó la lista con el índice de incidencia más alto, seguido por la industria y el sector agrario. Aunque estos datos reflejan una tendencia preocupante, cabe destacar que el sector agrario experimentó un descenso en su índice de incidencia, aunque sigue siendo motivo de preocupación.
Fuente: Elaboración del INSST a partir del Fichero de microdatos de accidentes de trabajo 2022. (MITES)
El sector servicios también ha sido afectado por un aumento en su índice de incidencia, impulsado por un incremento significativo en los fallecidos en actividades administrativas y de servicios auxiliares, así como en hostelería. Sin embargo, actividades como las sanitarias y los servicios sociales han mostrado una reducción en el número de víctimas mortales. Las divisiones de actividad económica con mayores índices de incidencia fueron aquellas relacionadas con el empleo, la silvicultura y explotación forestal, y la fabricación de productos metálicos, entre otras.
Por género
Al analizar las tasas de incidencia por género, se observa que los hombres tuvieron un índice de incidencia algo más del doble que las mujeres, con una mortalidad por accidente de trabajo casi 13 veces mayor en hombres.
En el año 2022, tanto hombres como mujeres presentaron formas similares de accidentarse en el trabajo. Los sobreesfuerzos fueron destacados, representando el 30.7% en hombres y el 27.3% en mujeres, seguidos por los choques o golpes contra objetos inmóviles (trabajador en movimiento), con el 23.9% en hombres y el 28.2% en mujeres.
Por edad
Por edad, se encontró que los trabajadores más jóvenes tuvieron un índice de incidencia casi el doble del total, disminuyendo gradualmente con la edad. Esta tendencia sugiere la necesidad de medidas específicas dirigidas a proteger a los trabajadores más jóvenes en el lugar de trabajo.
Fuente: Elaboración del INSST a partir del fichero de microdatos de accidentes de trabajo 2022 (MITES).
El INSST también ha destacado las formas más frecuentes de los ATJT mortales, donde los infartos, derrames cerebrales y otras patologías no traumáticas representan la mayoría de los casos, seguidos de cerca por atrapamientos y amputaciones, accidentes de tráfico y choques contra objetos inmóviles.
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